Este laboratorio está diseñado como un Sistema heterogéneo de experimentación coreográfica TCRV, el cual une el trabajo realizado en un espacio específico entre bailarines, coreógrafo y director multimedia; y establece una conexión entre bailarines y creativos de forma virtual para crear en conjunto, en tiempo real, en vivo y en locaciones diversas un solo universo artístico; experimentando así un proceso creativo de hibridación, en búsqueda de un metaverso transmedial.
Es decir, los artistas escénicos vivirán un proceso de creación con herramientas digitales que les permitirá trabajar en dos vías: con bailarines y creativos a distancia en tiempo real y al mismo tiempo trabajar con bailarines es el sitio/foro específico; contenidos por un dispositivo escénico multimedia que facilita la comunicación entre artistas y la relación con elementos sonoros, lumínicos y visuales; brindando la posibilidad de estructurar discursos narrativos detonados por el cuerpo, su movimiento y expresión, y que se vinculan a otros lenguajes como la música, el video, la animación y otras artes visuales.
De esta manera, el espacio se expande geográficamente en una colaboración con artistas en varios lugares, estados y países de forma simultánea para crear un producto artístico de nueva generación; una oferta artística que contempla la hibridación de lenguajes, formas y expresiones en un laboratorio interdisciplinario único en su tipo, y que busca ser albergado por una institución cultural con prespectiva y que acompañe las nuevas tendencias y desarrollo de artistas nacionales a favor de una nueva comunidad dancística. Así mismo, proponemos la creación de nuevos públicos abriendo el proceso del laboratorio creativo al libre transito de espectadores para que sea visitado y que juntos construyamos nuevas y mejores maneras de comunicación, retroalimentación y aprendizaje entre actores y receptores; entre artistas y público.
